Relaciones públicas

La promoción de los Juegos

El COOB’92 consideró que era necesario divulgar diversos aspectos particulares de la organización de los Juegos de la XXV Olimpíada y ofrecer un soporte específico a los diferentes actos relacionados con los Juegos y con la identidad específica de Barcelona’92, como las exposiciones informativas, las visitas a las instalaciones, la serie de dibujos animados protagonizada por Cobi o las campañas de promoción.

La exposición itinerante
La campaña Barcelona’92, objetivo de todos: el proyecto olímpico en tu ciudad, basada en una exposición itinerante instalada en el interior de una reproducción inflable del Estadi Olímpic, recorrió todas las capitales de las comunidades autónomas durante 1990, de la misma manera que durante la etapa de Candidatura lo había hecho el Bus Olímpico.

La exposición permanente
A finales de 1990, el COOB’92 elaboró el proyecto de una exposición permanente situada en el Estadi Olímpic. Esta exposición, denominada Barcelona olímpica, fue inaugurada el 13 de marzo de 1991, coincidiendo con la celebración de los 500 días antes de los Juegos.

La relación con los medios de comunicación

El COOB’92 siempre fue consciente de la importancia de los medios de comunicación para el éxito del acontecimiento olímpico. Ya en la etapa de la Candidatura los medios de comunicación tuvieron un papel primordial, en la medida en que encauzaron el entusiasmo de la sociedad por la elección de Barcelona como sede olímpica. En esta etapa se creó el Departamento de Prensa, integrado en la División de Imagen y Comunicación, responsable de establecer la política de comunicación del COOB’92 y de aplicarla en la relación con los medios de comunicación.

El Departamento de Prensa definió diferentes niveles de relación y de actuación según la localización de los medios (Barcelona-Cataluña, resto de España e internacionales). En todos los casos se ofreció una comunicación permanente y personalizada, fundamentalmente por vía telefónica. Además, hubo un conjunto muy diversificado de elementos de información producidos regularmente por el COOB’92 y dirigidos a todos los medios de comunicación: actos informativos (conferencias de prensa y sesiones de trabajo), publicaciones (un comunicado diario, un Newsletter semanal y un Dossier de Prensa que se revisaba semestralmente), acciones de relaciones públicas (visitas organizadas, viajes de familiarización y presentaciones) y una campaña de bienvenida (destinada a recibir a los periodistas y facilitarles la información necesaria durante los días inmediatamente anteriores a los Juegos).

La información al publico

Ante el interés público despertado por los Juegos Olímpicos en todo el mundo y el alud de solicitudes de informaciones generales y específicas a las que convenía dar una respuesta única sin perturbar la tarea cotidiana de las divisiones responsables de cada cuestión, se creó el Departamento de Información al público, dentro de la División de Imagen y Comunicación.

Su objetivo era informar al público en general y a los espectadores sobre todos los temas vinculados directamente a la organización olímpica (venta de entradas, alojamiento, derechos comerciales, visitas a las instalaciones, calendario, voluntarios, participantes, etc.) y también sobre las actividades ciudadanas y los servicios públicos relacionados con los Juegos.

Los canales utilizados para hacer llegar esta información a sus destinatarios fueron el teléfono, el correo, el fax, la atención personalizada y las publicaciones de gran difusión.

La Película Oficial

En el contrato firmado con el COI, en Lausana, el 17 de octubre de 1987, los responsables de la organización de Barcelona’92 asumieron el compromiso de realizar la película oficial de esta edición de los Juegos. La propiedad intelectual de la obra correspondería al COI, que cedería los derechos de explotación comercial al COOB’92 o a la productora de la película por un período de cuatro años. El COOB’92 decidió, posteriormente, confiar el proyecto a una productora que asumiera completamente los gastos de financiación, producción y distribución.

Después de analizar las propuestas, se eligió la presentada conjuntamente por tres productoras españolas: Group Films, Iberoamericana Films Internacional y Lola Films. Su proyecto era un documental titulado Maratón, que incluía también elementos de reconstrucción histórica y elementos dramáticos, dirigido por Hugh Hudson, el autor de Chariots of Fire (Carros de fuego).

Sin embargo, pocas semanas antes del comienzo del rodaje, Hugh Hudson abandonó el proyecto por discrepancias con Ibergroup y por razones presupuestarias. Entonces se contrató a Carlos Saura como director de la película.

La incorporación de Carlos Saura comportó cambios en el plan de Maratón. El guión fue modificado: se suprimieron los narradores y se centró la atención, sobre todo, en el universo del deportista. Además, después de presenciar la ceremonia inaugural, Carlos Saura decidió que la reconstrucción de la batalla de Maratón se hiciera con la colaboración de La Fura dels Baus, que se incorporaron al equipo de la película.

El protocolo

Desde el momento de su creación, la División de Relaciones Externas del COOB’92 orientó las actividades que debía realizar hacia la organización y la dirección de los programas de atención a los integrantes de la Familia Olímpica que visitaron Barcelona durante el período previo a los Juegos y, muy especialmente, a la atención personalizada de los miembros del COI, las autoridades y las personalidades nacionales y extranjeras. Era también responsabilidad de esta división la definición del proyecto de protocolo de los Juegos Olímpicos de Barcelona’92.

Las características de los Juegos de Barcelona, y las circunstancias especiales que concurrieron en ellos -entre las que hay que destacar, por una parte, la coincidencia de este acontecimiento con otros celebrados también en España, como la II Cumbre de Jefes de Estado Iberoamericanos, la capitalidad cultural europea de Madrid y la Expo’92 de Sevilla, y, por otra, la distensión de la situación política mundial que se tradujo en una participación sin precedentes de países y deportistas en los Juegos de Barcelona-, hicieron que Barcelona se convirtiese en el punto de encuentro de numerosos dignatarios y personalidades de todo el mundo.

El proyecto de protocolo se definió con la colaboración de los servicios de protocolo del Estado, de la Presidencia del Gobierno, del Ministerio de Asuntos Exteriores y del COI.

De acuerdo con los criterios organizativos fijados por el COOB’92, se optó por una estructura descentralizada, con departamentos de protocolo integrados en el organigrama de cada unidad.

(Textos extraídos de la Memoria Oficial de los Juegos de Barcelona’92)