Mascotas

Cobi, la mascota de los Juegos Olímpicos

Cobi, la mascota de Barcelona’92 fue elegida en enero de 1988 por la Comisión Ejecutiva del COOB’92. El diseñador barcelonés de origen valenciano Javier Mariscal dibujó un perro con aspecto humano y con los brazos abiertos, con un contorno hecho a partir de un trazo negro y con un color marrón muy aclarado para el cuerpo. Su figura inicial fue suavizada por ordenador por el diseñador del logotipo de las olimpiadas, Josep Maria Trias, con la intención de que fuera fácilmente aceptada por el gran público. Esta aceptación se consideraba un reto teniendo en cuenta que todas las mascotas olímpicas anteriores habían recurrido a trazos más propios de la animación al estilo Walt Disney. El estilo dado a conocer a partir del Cobi hace que las obras de Mariscal aún recuerden un trazo similar ligado a la imagen de Barcelona’92, momento álgido del diseño en la ciudad.

El nombre de “Cobi” fue una evolución a partir de las siglas del COOB’92, aprovechando que el resultado era fácil de pronunciar y escribir en la mayoría de lenguas. El Cobi fue ampliamente utilizado, siendo dibujado en multitud de complementos (pins, camisetas, etc.) y elementos de rotulación, practicando todos los deportes olímpicos, y también escenificando otras actividades diversas relativas a la XXV Olimpiada. El éxito supuso también la creación de una serie de televisión de dibujos animados, donde Cobi y Petra eran los protagonistas de una serie de aventuras que ocurrían en la ciudad de Barcelona.

Petra, la mascota de los Juegos Paralímpicos

La Petra también fue diseñada por Javier Mariscal, para garantizar un lenguaje unitario, y en un primer momento fue candidata a ocupar el lugar del Cobi como mascota de los Juegos. Su diseñador dijo que había hecho este personaje femenino porque tenía que representar un papel más reivindicativo.

La validez de esta mascota proviene de las limitaciones gráficas claramente perceptibles que tiene, le faltan los brazos, que aunque son conocidas son superables. La Petra transmite simpatía y alegría y con su personalidad simboliza la voluntad, el esfuerzo y el compañerismo que caracterizan los Juegos Paralímpicos.

Con sus proporciones sensibilizadoras, es una mascota que cumple perfectamente su función y además se trata de una solución estética muy impactante.

Nosi, la mascota de la Olimpíada Cultural

Originalmente se iba a llamar Cobita pero finalmente recibió el nombre de Nosi y también fue diseñada por Javier Mariscal con la estética unificadora de las otras dos mascotas.

Esta mascota no estaba dirigida directamente al público infantil sino a todo el mundo y, aunque no tuvo tanta difusión como las otras dos mascotas, se pudo ver representada en todo el diseño de la Olimpiada cultural.

La Cobi troupe, la serie de televisión y los cómics

La Cobi Troupe fue una serie de dibujos animados que se estrenó el 2 de enero de 1992 en TV3 y el resto de televisiones autonómicas de España. Constaba de 26 capítulos de 30 minutos cada uno y fue producida por BRB con un guión de El Tricicle. Hubo un claro interés en que la producción fuera en Barcelona para desarrollar una industria de la animación local. Se invirtió un presupuesto de entre 400 y 700 millones de pesetas (2,4 a 4,2 millones de euros).

Paralelamente a la serie, la editorial Plaza y Janés publicó seis álbumes con las historietas de los mismos personajes, haciendo una tirada de 7000 ejemplares por cada volumen, con los siguientes títulos:

• Visita a Barcelona
• Guateque espacial
• Un día en la playa
• Una noche en la ópera
• Amigos para siempre
• Cobi, la mascota olímpica

Todos los personajes de la serie fueron diseñados por Javier Mariscal y, aparte de Cobi, Petra y Nosi, también estaban Jordi, Lydia, Cachas, el gato Bicho y el doctor Normal . Cobi vivía aventuras alocadas de humor blanco, con las que viajaba por todo el mundo, incluso al espacio exterior, para invitar a todos a la gran fiesta que se estaba preparando en Barcelona.