Pabellón de la España Industrial

Situado junto a la estación de Sants de Barcelona, ​​el Pabellón de la España Industrial es uno de los equipamientos construidos específicamente con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona’92, y fue proyectado por los arquitectos Ramon Artigues y Ramon Sanabria. Se edificó sobre una antigua zona industrial de finales del siglo XIX, siguiendo el criterio de renovación urbanística de antiguos terrenos en desuso que acompañó el proyecto olímpico de Barcelona’92. Financiado y construido por el COOB’92, se inauguró el 7 de diciembre de 1991 para celebrar la Copa del Mundo de Halterofilia como prueba previa para la acogida de la competición de este deporte durante los Juegos Olímpicos de 1992.

La adecuación a los requerimientos olímpicos supuso la instalación de gradas provisionales dentro de la nave principal, y la distribución del acceso por el público y la prensa a través de una pasarela que conectaba directamente con la plaza de los Països Catalans frente a la estación de tren. El acceso de la Familia Olímpica se hacía a nivel de pista conectando directamente con la zona ajardinada del parque de la Espanya Industrial, que tendría la función de área de descanso para deportistas, equipos técnicos, etc. Durante los Juegos, el personal que estuvo destinado constó de 349 personas, 306 de los cuales eran voluntarios.

Desde los Juegos de Barcelona’92, el Pabellón de la España Industrial ha sido remodelado en varias ocasiones y actualmente dispone de 10.000m2, que incluyen una pista polideportiva donde se entrenan varios pequeños clubes deportivos de la zona, una piscina cubierta con 6 carriles, áreas de fitness, etc.