Frontó Colom

El Frontón Colón fue la sede de parte de las pruebas de pelota vasca durante los Juegos Olímpicos de Barcelona’92. Se celebraron tanto las pruebas femeninas como masculinas de esta modalidad, que se convertía deporte de demostración por última vez, ya que lo había estado en París 1900 y 1924, así como México 1968. Situado en la parte baja de Las Ramblas, al comienzo de la parte conocida como Rambla de Santa Mónica, el edificio donde se ubica fecha de 1882 y había sido un centro muy activo para la práctica deportiva hasta 1975, que quedar en desuso.

Precisamente fue con motivo de la XXV Olimpiada que se recuperó esta instalación, aprovechando el impulso de remodelación urbanística de los Juegos, y con especial atención a un equipamiento deportivo de Ciutat Vella, zona emblemática de la ciudad. La remodelación corrió a cargo las arquitectas Anna Soler y Silvia Farriol. Se conservó sólo dos de las paredes antiguas, la lateral y la frontal, y el espacio central se diseñó pensando en poder convertirlo en una pista polideportiva con posterioridad a los Juegos. Con los años, ha convertido en un centro municipal de deportes de pequeñas dimensiones pero con una gama de servicios que incluye sala de fitness, piscina de dos carriles, y múltiples actividades dirigidas. De titularidad pública, su gestión es privada.