Estadio Olímpico

Durante los Juegos de la XXV Olimpiada, el Estadi Olímpic fue el escenario de las ceremonias de inauguración y clausura, las competiciones de atletismo en pista y los tramos de llegada de las pruebas de maratón y marcha. La instalación actual es el resultado de la remodelación del antiguo Estadio proyectado por Pere Domènech i Roure en 1929, con motivo de la Exposición Internacional de Barcelona. Esta remodelación consistió en mantener la fachada histórica exterior y destruir y rehacer el interior del estadio, para aumentar el aforo y el confort de los servicios, y adecuarse a los requerimientos de la competición de alto nivel. Se convirtió en el edificio principal de la Anella Olímpica en la montaña de Montjuïc. Con una capacidad de hasta 60.000 personas, su aforo puede ser superior en eventos musicales y artísticos en los que el público se puede situar sobre el terreno de juego.

En 1955 el Estadio fue la instalación principal de los II Juegos Mediterráneos, pero después de este acontecimiento, el equipamiento cayó en desuso, hasta que, con la candidatura olímpica se abrió el período de remodelación que básicamente ha perdurado hasta la actualidad. Rebautizado como Estadio Olímpico Lluís Companys en 2001 en homenaje al presidente de la Generalitat fusilado por el régimen franquista, desde 1997 hasta 2009, fue el campo habitual del RCD Espanyol de Barcelona. En 2010 acogió el 20 º Campeonato Europeo de Atletismo, por lo que fue remodelado en parte nuevamente. Disfruta de la calificación de 5 estrellas de la UEFA como campo óptimo para acoger grandes eventos futbolísticos.